11 octubre 2011
La erupción de El Hierro podría provoca la emigración de especies
El Diario de Las Palmas, laprovincia.es, publica hoy, que el experto en biodiversidad marina Ricardo Haroum pronostica la emigración de especies a aguas más frías tras la erupción volcánica en La Restinga.
El investigador de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria afirma que una erupción volcánica a más de mil metros de profundidad puede ocasionar la emigración de especies que habiten en la zona hacia aguas más frías, aunque se desconoce qué tipo de vida existe por debajo de los cien metros.
"Por desgracia no tenemos información precisa a partir de los cien metros de profundidad en Canarias. No obstante es previsible que si existen peces, pulpos, calamares gigantes, cetáceos... especies que se mueven por sus propios medios, emigren a otras zonas más seguras si existe una auténtica erupción, al igual que cuando hay un incendio en tierra, los animales se desplazan a otras áreas", afirmó el biólogo de la ULPGC.
El especialista en biodiversidad marina asegura que existen muchas variables desconocidas que impiden hacer una pronósticos sobre el alcance de una erupción volcánica en la reserva marina de La Restinga.
A partir de la información registrada tras la erupción volcánica en La Palma en 1971, Haroum destacó que la zona marina afectada se repobló al año del suceso con las mismas especies que existían anteriormente.
Un fenómeno importante que condiciona los poblamientos biológicos que existen en El Hierro es la temperatura de sus aguas, que son más cálidas que en el resto del Archipiélago canario, en unos dos grados. Esto hace que aumente la presencia de especies tropicales de manera más abundante que en el resto de las islas, tales como el gallo oceánico, el tamboril espinoso, el pez trompeta, el salmonete amarillo, así como varias especies de cángridos tropicales, cabositos tropical y la langosta herreña, que son relativamente abundantes en las aguas de El Hierro.
Otro factor importante que influye en la presencia de especies es la proximidad de aguas oceánicas abiertas, lo que permite avistar con relativa frecuencia especies pelágicas migratorias, como las mantas, el tiburón ballena, atunes y petos.
Articulo completo publicado en el Diario de Las Palmas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario